En su origen los motores de búsqueda actuaban como índices de websites donde el usuario debía conocer el título del sitio al que quería acceder (Archie 1990, Excite 1993 o Altavista 1994).

Mucha agua ha pasado desde entonces y en la actualidad Google, el búscador estrella, se ha sofisticado para satisfacer las demandas de los usuarios y evolucionado hasta el punto de que la búsqueda se ha convertido en una verdadera conversación. Además se han creado buscadores especializados: Google Maps, YouTube, Google Shopping, etc. e incluso dentro de los e-commerce, lo cual aumenta la importancia de la presencia en Internet al momento de pensar en hacer marketing en buscadores.

El alcanzar y mantener un espacio visible en Google es el desable de toda marca, independientemente de si venden o no por Internet. Hoy día las fronteras con el mundo digital son cada vez más difusas y ya no podemos pensar en el consumidor de manera separada. Los usuarios buscan información y comparan antes de realizar la compra lo cual permite presentar sus propuestas de valor a los actores del mercado. De la misma manera incrementa la lucha por aparecer en los primeros lugares de los buscadores.

La evolución de los métodos de búsqueda de Google unido al constante cambio del comportamiento de los usuario dan origen a múltiples escenarios para el posicionamiento. Reinventarse y adaptarse supondrá el éxito o el fracaso de las estrategias del posicionaminto en Google.