Llegar al corazón de los adultos jóvenes es complejo para las Pymes ya que tienen que comprender las nuevas necesidades de este grupo de consumidores y que cuestiones valoran. Y los adultos jóvenes tienen una nueva relación con las empresas, buscan características distintas y prefieren cuestiones diferentes.

Uno de los puntos en que las Pymes deben esforzarse es en la atención al cliente. Los adultos jóvenes esperan ciertas cosas de la relación de consumo por lo que se debe trabajar firme para estar a la altura. Un análisis de Forbes entrega una conclusión fundamental para el mercado de adultos jóvenes: las marcas no deben descuidar el uso de las nuevas tecnologías para mejorar y mantener un buen servicio de atención a clientes.

El servicio de atención al cliente no es solo un servicio de atención al cliente

El servicio de atención al cliente no es solo un modo de solucionar los problemas de los consumidores o de ofrecerles apoyo. En el caso de los adultos jóvenes, debe ser algo más que eso. En primer lugar, se debe ofrecer un buen servicio entregando una buena experiencia a fin de atraerlos y convertirlos en clientes. En segundo lugar, es una de las mejores maneras de hacer que los adultos jóvenes hablen de tu producto y de tu marca.

Como señala el análisis, a los adultos jóvenes les encanta hablar de su experiencia si ha sido buena y así hacen llegar noticias de la empresa a otros adultos jóvenes.

Un buen servicio de atención al cliente no es el ‘camarero pesado’

No hay que lanzarse a una carrera para ser el que más, es decir, no aplicar el modelo del camarero que pregunta tanto si nuestra comida es satisfactoria que satura. Para los adultos jóvenes una buena atención al cliente es una mezcla entre servicios informatizados que dan ayuda estandarizada y trato personal con ejecutivos humanos.

En definitiva, quieren una asistencia digital y móvil que pueda ser usada desde sus teléfonos inteligentes y que este siempre respaldada con algún ejecutivo para cuando la plataforma no funcione.

El híbrido debe ser atractivo

Pero los adultos jóvenes además quieren que la propuesta sea atractiva y que sea de buena calidad, es decir, la experiencia tiene que ser memorable.

¿Cómo lograrlo?

Un ejemplo es el caso de un restaurante cuyo servicio permite que los consumidores accedan a la información vía tablets y a sus servicios mediante camareros. La vía tecnológica amplía la información hasta niveles imposibles con camareros, por ejemplo: las calorías de los platos o sus características, encontrar ingredientes alternativos para hacer los platos más sanos, etc. Sin embargo el consumidor no lo hará todo en su tableta, sino que requerirá la atención de un camarero que le ayude con el pedido cuando el consumidor no desee toda esa información.